Antes de pensar en dar el gran paso de mudarte a tu propio departamento, es importante que tengas muy claro todos los gastos que traerá consigo automáticamente esta importante decisión. Aquí tenemos dos categorías, los gastos variables que se ven reflejados en tu alimentación, entretenimiento, gasolina (en caso tengas carro), spa, regalos; la lista puede ser larga porque depende mucho de la persona. Por otro lado, tenemos los gastos fijos, que son estos pagos obligatorios mensuales en los que gastas siempre la misma cantidad de dinero.
Pago de servicios
Puede que ahora mismo no te encargues del pago total de los servicios y por eso no sientes que es mucho. Sin embargo, cuando te independices, el pago del agua, luz, internet y cable correrá por tu cuenta. Asegúrate de agregarlo a tu presupuesto mensual para no tener sorpresas y mucho menos cortes de alguno de ellos.
Mantenimiento del edificio
En todo proyecto inmobiliario se paga una cuota de mantenimiento mensual. Este dinero está destinado para poder resolver algún imprevisto dentro del edificio, como por ejemplo, si algún día el ascensor se llega a malograr. También es un dinero destinado a la limpieza periódica de áreas comunes y cualquier arreglo que la junta directiva crea conveniente.
Ten cuidado de no retrasarte con estos pagos, ya que, si ese fuera el caso, aparecerás en la lista de deudores del edificio.
Cuotas del crédito hipotecario
Probablemente el gasto fijo más importante sea este. Si tu deuda con el banco es por muchos años es importante no fallar, ya que podrías entrar en Infocorp.Esto te colocaría como sujeto no apto para créditos y otros beneficios económicos. Un consejo es que antes de solicitar un crédito hipotecario, verifiques que este pago no sobrepasará el 30% de tus ingresos. Caso contrario, podrías tener problemas a corto plazo.